Las plántulas de pino en vivero requieren un sustrato ligero y nutritivo, riegos constantes sin encharcar, buena iluminación y protección contra temperaturas extremas. Es importante aplicar fertilización balanceada en pequeñas dosis, mantener control de plagas y hongos, y asegurar una ventilación adecuada.

Cuando alcanzan entre 20 y 30 cm de altura, ya están listas para el trasplante, garantizando su desarrollo sano y fuerte en el entorno natural.

Campaña de reforestación que ha logrado plantar más de 600,000 árboles nativos en zonas afectadas de Puebla, Tlaxcala y Veracruz.

Campaña masiva de reforestación enfocada en la restauración de zonas afectadas por incendios, tala y sequía en los estados de Puebla, Tlaxcala y Veracruz. Mediante alianzas con ejidos, comunidades y organizaciones ambientales, se han plantado más de 600,000 árboles nativos en municipios como Libres, Tlatlauquitepec, Orizaba, Ixtacamaxtitlán y Altzayanca.

Derivado del pacto con Earth Charter International, este proyecto realiza diagnóstico de plagas, preparación de suelo y reforestación con especies nativas. Se expandió a municipios como Ixtacamaxtitlán, Tlatlauquitepec y zonas de Veracruz, siempre con apoyo comunitario y alineado a estándares globales de sustentabilidad.

Iniciativa dedicada a la recuperación de bosques destruidos por incendios forestales. Comenzó con la intervención de un polígono de más de 1,500 hectáreas entre Puebla y Tlaxcala, realizando diagnóstico de plagas, preparación de suelo y reforestación con especies nativas. El proyecto se deriva del pacto de sustentabilidad firmado con Earth Charter International, avalado por ONU Medio Ambiente y UNESCO.

«¡Cenizas a Vida!» es un ejemplo de cómo la acción local puede alinearse con estándares globales, esto es tras detectar zonas afectadas por incendios y plagas, se ejecutan obras de restauración que incluyen la plantación de árboles y la implementación de medidas preventivas.

El proyecto prioriza la supervivencia de las plantaciones mediante el involucramiento directo de las comunidades en el cuidado y mantenimiento.

Este proyecto nace en 2023 como respuesta a la degradación ambiental en la región central de México. Gracias a convenios con aliados como la Fundación Grupo México y la participación de viveros comunitarios, se ha logrado producir y plantar especies nativas adaptadas a las condiciones locales. Las comunidades reciben capacitación para asegurar el crecimiento y desarrollo de los árboles, transformándose en guardianes de su propio territorio. La meta es alcanzar un millón de árboles plantados, devolviendo la vida a bosques y suelos que parecían perdidos.